Desde las calientes tierras de Los Mochis, Sinaloa, salió un joven con brazo de dinamita y nervios de acero. Su nombre: Andrés Muñoz. A sus 26 años, este pitcher mexicano no solo se ha ganado un lugar en el exigente bullpen de los Seattle Mariners… se ha convertido en su joya más letal.
En este 2025, Muñoz no está tirando strikes: está pintando poesía en la lomita. En 11 apariciones ha lanzado 11 entradas intocables. Ni una carrera permitida, 14 ponches lanzados con precisión quirúrgica, y un WHIP de 0.91 que grita dominación total. Ah, y por si fuera poco, ya colecciona 7 salvamentos como si cerrar partidos fuera tan fácil como abrocharse los spikes.
Andrés Muñoz: Known cat lover 🐈 pic.twitter.com/TYOcbwJV7C
— Seattle Mariners (@Mariners) April 18, 2025
Pero su historia no empieza aquí. En 2024 fue convocado al Juego de Estrellas, poniendo el nombre de México en alto y dejando claro que no es promesa, sino realidad. Ese mismo año, escribió historia al imponer un récord con 11 salidas consecutivas sin permitir un solo hit. Sí, leíste bien: ni uno.
Con una recta que coquetea con las 100 millas por hora y un slider que parece sacado de un videojuego, Muñoz es una pesadilla para los bateadores y un sueño hecho realidad para los fans de Seattle. Y aunque su camino ha tenido obstáculos incluyendo una cirugía Tommy John en el pasado, Andrés ha vuelto más fuerte, más rápido y más temido que nunca.
Back at it in Beantown for Game ✌️ #TridentsUp pic.twitter.com/kZyWCxYbJv
— Seattle Mariners (@Mariners) April 23, 2025
¿El futuro? Brilla más que los reflectores del T-Mobile Park. Y si sigue así, no solo lo veremos como el mejor cerrador mexicano de la MLB… podríamos estar presenciando el nacimiento de una leyenda.