Balón y pie

¿Cuánto durará la grandeza de Chivas?

Ya no se que pensar. En mi mente, deseaba que eliminaran a las Chivas, porque no se debe premiar a la mediocridad. Pero, al mismo tiempo, seguía soñando con la victoria; con ver mi “Rebaño” en la fiesta grande del fútbol mexicano. ¿Para qué? No sé. Tal vez suene triste, y, a la vez, un poco mediocre, pero simplemente verlos ahí me genera alegría.

La triste realidad de Chivas

Cuando ocurrió lo inevitable y finalizaron su participación en el Clausura 2025, me entró un pensamiento bastante pesimista, pero, lamentablemente, realista: ¿A qué niño le gustaría irle a un equipo tan mediocre? La única forma en la que puedo ver que las nuevas generaciones logren amar a Chivas es por herencia; por los futuros padres que seremos nosotros, los aficionados que seguimos aquí. 

Pero me pongo a analizar la situación, y pienso: ¿Con qué cara le voy a decir a mis hijos que apoyen la mediocridad? ¿Cómo les puedo inculcar el amor que le tengo a una institución que ya no refleja lo que, en mis primeros años de vida, decidí apoyar?

La grandeza del Rebaño se está agotando

Cuando comencé a apoyar al equipo, me enorgullecía por muchas cosas: éramos el equipo más grande del país, jugábamos con puro mexicano y nos convertíamos en locales en todos los estadios. Mi pasión creció aún más cuando los ví en vivo por primera vez, en su propio estadio, remontándole a los Jaguares de Chiapas en el ya lejano 2011. Recuerdo salir del, en ese entonces, Estadio Omnilife, con un orgullo tremendo: mi equipo era el más grande.

Ahora, ya no queda nada de esa grandeza. La historia no es suficiente para justificar la última década y media del equipo; mencionar a la Era Almeyda no es suficiente para tapar la crisis. Incluso, en 2023, se perdió una final como un equipo chico: encerrados a falta de media hora para que finalizara. Me duele mucho, pero estas Chivas no son ni una pizca de aquellas de las que me enamoré.

Matías Almeyda dirigiendo un partido de Chivas, (X: @Chivas)

Amaury, vete ya

¿Voy a dejar de apoyarlas? No, pero la directiva debe comprender que todos los aficionados estamos cansados; cansados de excusas mediocres y promesas vacías. Chivas fue, es y será el equipo de mis amores, pero no nos merecemos lo que hemos vivido los últimos años.


Amaury, por favor, si no quieres aportar nada al equipo, vete; vete antes de que le quites la última pizca de grandeza que le queda a la institución. Estoy seguro de que de hambre no te vas a morir.

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